Cuando un puente está ubicado en una curva, se deberá tener cuidado de verificar la fuerza centrífuga que puede provocar momentos torsores importantes en la superestructura y esfuerzos cortantes a nivel de apoyos y coronamiento de la infraestructura.
Esta fuerza viene dada como un porcentaje de la carga viva sin impacto y se evalúa con la siguiente expresión:
Donde:
v = Velocidad de diseño de la carretera en Km./HR.
R = Radio de curvatura en el eje del puente en metros
La fuerza horizontal resultante por este concepto debe ser aplicada a todas las fajas de tráfico.
La altura de aplicación de esta fuerza es 1.8m. sobre la capa de rodadura.
En los puentes curvos se debe prever el peralte de la calzada evitando espesores adicionales, es decir alzando las vigas sobre sus pedestales de apoyo.
Cuando un piso de losa de hormigón armado o un tablero de parrilla metálica está ligado a sus apoyos, se puede suponer que el tablero resiste dentro de su plano el corte resultante de la fuerza centrífuga que transmite la carga viva, para lo que el peralte será tomado en cuenta.